El término llave proviene del latín clavis. Se define como un utensilio, herramienta o instrumento que permite accionar un engranaje o dispositivo, para abrir o cerrar una cerradura.
La misión de la llave es custodiar el acceso a un lugar restringido o bloqueado; o a un objeto determinado a personas no autorizadas. Esto se debe a que los seres humanos tenemos el instinto de guardar y proteger aquello a lo que más estima tenemos.
La llave es considerada como un símbolo de poder, no apto para cualquiera, por ejemplo, la llave del cielo de San Pedro o la llave de las ciudades entre otras. Actualmente, la llave transmite sobre todo seguridad, saber que lo que más nos importa está bien protegido.
Su creación se atribuye a Teodoro de Samos en el siglo VII a.C. Este arquitecto, escultor e inventor nació en la isla de Samos de la Antigua Grecia. También, se le asigna la invención del candado y por ello, era necesario inventar la llave para hacer funcionar el mecanismo y conseguir abrirlo y cerrarlo.
A pesar de ello, el origen de la llave se remonta al antiguo Egipto. Estaban fabricadas de madera y eran de grandes dimensiones, llegaban a tener un tamaño de 1,2 metros. Estas se usaban para salvaguardar los hogares de personas de alta clase social.
No fue hasta siglos después, en la época de los grandes Imperios Griego y Romano, cuando ganaron popularidad, ya que estos perfeccionaron su uso y diseño.
Las llaves pasaron de ser de madera a metal. Su tallado debía ser muy preciso y minucioso para que los bombines de la puerta pudieran hacer su función. Cualquiera podía poseer una para cerrar su casa o caja protegiendo sus valiosas pertenencias, como joyas o cualquier tipo de mueble.
Las “cerraduras romanas” funcionaban mediante el deslizamiento de la llave, donde un pestillo se desbloqueaba cuando salía del muelle, liberando la llave que pasaba por la cerradura y levantaba el muelle accionando el pestillo.
Al ver como las personas custodiaban sus bienes más preciados, aparecieron los ladrones que superaron todos los cambios e innovaciones en seguridad que se hicieron.
Durante la Edad Media, los cerrojos y llaves se creaban gracias a maestros artesanos, quienes introducían pequeños detalles con relieve o perforaciones.
En el siglo XX, las llaves se fabricaban con diferentes materiales, normalmente metálicas de acero o de aluminio y su principal uso recaía en abrir cerraduras. Estas se centraban en la complejidad y en introducir mecanismos más innovadores y de mejor calidad.
En la actualidad, la llave se utiliza con el mismo fin que lo hacían las primeras civilizaciones. Las cerraduras y las llaves han evolucionado y se han creado diferentes estructuras y modelos que cumplen diversas funciones para lograr una mayor seguridad.
De la mano de la Era Digital y gracias a los avances en la tecnología, podemos hablar de la llegada de las cerraduras inteligentes.
Estas cerraduras se componen de gadgets o aparatos electrónicos con la intención de aportar un plus de seguridad y una amplia facilidad de apertura y cierre de cerraduras. Este tipo de sistemas piensan en la comodidad, y el confort, además de la seguridad y pueden estar compuestas o no por llaves, lectores de huellas digitales, comandos de voz, PIN, etc.
Existe una gran variedad de cerraduras inteligentes como las tarjeras de proximidad. Este sistema de apertura es uno de los más conocidos que ya se deja ver en hoteles, empresas u oficinas. Es uno de los sistemas más actuales, rápidos, sencillos y cómodos.
Esta evolución hace posible que tanto negocios como hogares estén invirtiendo en innovación y de esta forma se continúe con el desarrollo del sector haciendo posible una mejor estética y manejo. La clave es saber encontrar qué cerradura es la que mejor se ajusta a nosotros.
Debido a estos avances tecnológicos, las empresas tienen que invertir en su negocio, tanto a nivel offline como online. Por ello, buscar una buena agencia de marketing para determinar una estrategia digital es fundamental y así, los clientes y usuarios de empresas como Cerrajero Madrid 24 horas las novedades y servicios que ofrecen.